Hay varias cosas que no entiendo de Sockbox. Primero, su nombre. ¿Caja de calcetines? ¿En serio. Segundo, que a pesar de sus 4 añitos de vida no tienen más web que su facebook y un perfil fantasma en Etsy. Tercero, su trayectoria. Empezaron diseñando medias y acabaron con camisones que sirven para irse de boda. Y, por último, no acabo de entender este momento cañón de luz + ojos vendados + forcejeo estático. ¿Qué nos quieres decir, Sockbox?

PERO, a pesar de todo esto, su colección Film Noir me ha enamorado. Últimamente parece que las marcas de lencería tienen que elegir entre ser cursis o irse a lo bondage. En Sockbox, en cambio, han hecho una colección sencilla, gráfica y muy sofisticada.

¡Hurra por ellos! Estaremos atentos a su evolución.

Bonus tracks:

Me he hecho una page en facebook (no preguntéis, simplemente haced like).

Tengo post nuevo en (Dis)orderMag. Esta vez la cosa va de pálidas.

 

ACTUALIZACIÓN (14/11/2012): En los comentarios, un responsable de la marca explica que ahora Sockbox se llama Amoralle.